miércoles, 24 de enero de 2018

Estados Unidos vs Rusia: el Fin de la No Proliferación Nuclear


Por Tom O'Connor,  10/01/18

Newsweek.com

Artículo Original

Estados Unidos y Rusia han revertido décadas de esfuerzos en la no-proliferación con la intención de modernizar y potencialmente expandir sus arsenales de armas nucleares, que tanto el presidente Donald Trump como su homólogo ruso, Vladimir Putin, han pregonado como vitales para la seguridad nacional de sus respectivos países.

El ministro de Defensa ruso, Sergey Shoigu, dijo el miércoles que las reservas nucleares de su país, las más grandes del mundo, deberían estar casi completamente equipadas con nuevo y avanzado armamento en unos pocos años más. Mientras que la potencia militar rusa sigue siendo una fracción de lo que era en la época soviética, los esfuerzos de Putin por revolucionar sus fuerzas armadas hacia una potencia guerrera líder, capaz de enfrentar conflictos en el exterior y defender las masivas fronteras de Eurasia, han incluido un renovado enfoque en las armas de destrucción masiva.

"El principal objetivo debería ser el de impulsar aún más el poder nuclear estratégico. La participación de avanzados armamentos en la tríada nuclear rusa debería constituirse al menos en un 90 por ciento para 2021", dijo Shoigu en una reunión ministerial, de acuerdo a la agencia estatal rusa Tass.

"La tarea se estableció en proporcionar un cumplimiento incondicional del programa estatal armamentístico. El ejército recibirá más armas con guías de precisión y sistemas de reconocimiento, comunicaciones y guerra electrónica de vanguardia, así como equipos militares modernos", agregó.

Shoigu dijo en noviembre que las fuerzas estratégicas no nucleares de Rusia serían completamente capaces de defender al país en 2020, pero el desarrollo y las adiciones a la tríada nuclear de Rusia han persistido. Putin dijo el mes pasado que el esfuerzo de modernización nuclear ya había alcanzado un 79 por ciento y que un 90 por ciento de las avanzadas armas en 2021 incluirían "sistemas misilísticos capaces de superar confiadamente los actuales sistemas de defensa antimisiles e incluso los proyectados".

En el mar, Rusia estuvo desarrollando nuevos submarinos equipados con misiles balísticos intercontinentales con capacidad nuclear R-29RM Bulava (ICBM) y, en tierra, ha supuestamente mejorado su ICBM Topol-M con capacidad nuclear para tener la habilidad de penetrar sistemas de defensa antimisiles no diferentes a los  desplegados por EE. UU. en Europa. A pesar de numerosos reveses, también se esperaba que Rusia probara pronto su ICBM Sarmat "Satán 2", del cual se dice que es capaz de aniquilar a todo el estado de Texas. El Tupolev Tu-160M2, el más reciente bombardero nuclear ruso, tiene previsto realizar su primer vuelo de prueba el próximo mes.

Citando a funcionarios del Pentágono y a expertos nucleares, el Washington Free Beacon informó el mes pasado que se creía que Rusia estaba expandiendo su arsenal de armas nucleares hasta las 8.000 ojivas para el 2026. Se anticipaba que estos hallazgos fueran incluidos en la Revisión de la Postura Nuclear que se esperaba fuera  divulgada cerca del discurso Sobre el Estado de la Unión que daría Trump a fines de este mes.

Al igual que Putin, Trump ha expresado su deseo de reforzar su arsenal nuclear y dejó en claro a principio de su mandato como presidente que quería una fuerza estadounidense más grande y más fuerte, solicitando se incremente diez veces la cantidad de armas nucleares, de acuerdo a un informe. Mientras el debut de la Revisión de la Postura Nuclear de la administración Trump aún no sea divulgada, al menos un ex funcionario que vio una copia del documento dijo el martes que el Pentágono estaba ahora buscando desarrollar armas nucleares más pequeñas y "utilizables" y disuadir a otras potencias nucleares.

"Lo que me contaron las personas que escribieron eso, es que lo que intentaban hacer era enviar un claro mensaje de disuasión a los rusos, a los norcoreanos y a los chinos", dijo Jon Wolfsthal a The Guardian, quien trabajó como asesor en control de armas y no proliferación nuclear para el ex presidente Barack Obama.

El supuesto plan de Trump para relajar las restricciones en el uso de armas nucleares incluía una nueva ojiva nuclear de bajo rendimiento a ser instalada en el misil balístico Trident II D5 lanzado desde submarinos. Mientras Rusia y Estados Unidos se han acusado mutuamente de violar el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio de 1987, también han coqueteado con la idea de crear estas llamadas "armas nucleares tácticas" que tienen un menor impacto, pero que algunos dicen aumenta la probabilidad de que un conflicto se torne nuclear.

Rusia y Estados Unidos han adoptado formas de una política de "lanzamiento bajo ataque", lo que significa que no necesariamente se opondrían a llevar a cabo un ataque preventivo, pero sólo si se detecta una amenaza existente. En una hoja informativa actualizada a principios de esta semana, la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares calculó que Rusia posee 7.000 ojivas nucleares y Estados Unidos 6.800.

Al igual que las dos principales potencias, los estados nucleares de China, Francia y el Reino Unido fueron todos firmantes del Tratado de No Proliferación Nuclear de 1970, pero se cree que la India, Pakistán, Israel y Corea del Norte también poseen todos ellos armas nucleares a pesar de no haber firmado el acuerdo histórico.