sábado, 9 de mayo de 2009

Israel, Irán y todo Medio Oriente Nuclear


Israel insiste en posible ataque a Irán
Haaretz.com 05/04/2009
por Natasha Mozgovaya
Washington - La lluvia torrencial no impidió que más de 6000 personas asistieran a la apertura de la conferencia anual del AIPAC el domingo, la cual es considerada como uno de los diez mayores eventos políticos y mediáticos.
Políticos, académicos, activistas de la comunidad judía y más de 1000 estudiantes universitarios vinieron a participar en las docenas de paneles y talleres auspiciados por el American Israel Public Affairs Committe (Comité Estadounidense-Israelí de Asuntos Públicos), un prominente grupo lobbysta pro Israel. Los temas abarcaron desde "hacer lobby para principiantes" hasta varios escenarios para tanto el futuro de las relaciones EE.UU-Israel como para el desarrollo de los acontecimientos en Medio Oriente.
Debido a que la conferencia de este año coincidió con un nuevo gobierno en Israel, hubo más tomadores de decisiones anteriores que actuales presentes. Sin embargo, el Presidente Shimon Peres asistirá a la sesión del lunes, que se enfocará sobre la amenaza nuclear iraní, y el Primer Ministro Benjamin Netanyahu se dirigirá a los concurrentes mediante video esta noche. Ni el Presidente de EE.UU Barack Obama ni la Secretaria de Estado Hillary Clinton - que asistieron ambos a la última conferencia anual del AIPAC como candidatos presidenciales - asistirán a la reunión este año. En cambio, el gobierno de EE.UU. será representado por el Jefe de Gabinete de la Casa Blanca Rahm Emanuel. Varios líderes congresales también asistirán.
Michael Oren, el notorio historiador que se perfila como el próximo embajador israelí en EE.UU, apareció en un panel acerca de la "paz fría" de Israel con Egipto y Jordania. Pero abrió sus comentarios remarcando que como el gabinete aún tenía que aprobar formalmente su designación como embajador, estaba dirigiéndose a la concurrencia estrictamente como un académico.
El tema más caliente en los pasillos fue el programa nuclear de Irán y cómo Israel respondería, y esto también captó plenamente la atención en el programa oficial.
"Israel no permitirá que Irán obtenga armas nucleares," dijo Oren a los lobbystas.
Oren, un destacado historiador, fue citado como diciendo que israel no permanecería pasivo mientras que un régimen que ha jurado borrarlo del mapa adquiera los medios para hacerlo, refiriéndose a comentarios hechos por el presidente Mahmoud Ahmanidejad.
En otro panel de discusión ayer, el ex vice ministro de defensa Ephraim Sneh dijo crudamente a los participantes que el tiempo se estaba acabando. Basado en lo que Israel sabe acerca del progreso de Irán, dijo, la fecha límite para una decisión es ahora.
Israel, añadió, tiene una "solución operativa" para este programa que puede implementar por su cuenta, sin el permiso o apoyo de ningún otro país. Sin embargo, dado que cualquier acción militar israelí seguramente provocaría una represalia iraní, la acción militar es un último recurso, dijo.
De todas maneras, remarcó, la acción militar es mejor que permitir que Irán tenga armas nucleares, ya que si Irán adquiriese armas nucleares, esto afectaría negativamente a Israel en siete maneras distintas: la inmigración se extinguiría; los padres alentarían a sus hijos a emigrar; la inversión en Israel caería significativamente; los moderados en Medio Oriente se harían más extremistas, haciendo mucho menos posible un acuerdo con Siria, por ejemplo; los terroristas se harían más temerarios, gracias a tener un patrón con armas nucleares; la toma de decisiones de Israel se haría más tímida, por miedo a provocar a Irán; y una carrera armamentística nuclear estallaría a través de Medio Oriente. Existen rumores, hizo notar, sobre que Arabia Saudita ya ha hecho un acuerdo con Paquistán, bajo el cual los saudíes comprarían la bomba de parte de sus colegas sunnitas musulmanes en Islamabad en el instante en que el Irán shiíta adquiera armas nucleares. Y Egipto ciertamente no se quedaría atrás.
Preguntado acerca de la posibilidad de que Rusia y China aceptaran imponer serias sanciones contra Irán, Sneh dijo que no veía ningún tipo de chance de que esto ocurra. Pero aún si ocurriera, añadió, Irán podría encontrar otras fuentes de combustible y partes de repuesto para sus reactores.